Vamos a dejarlo claro desde un principio. Las encías sangrantes son, en la mayoría de los casos, una advertencia temprana de un problema de salud bucodental. Un trastorno que, en muchas ocasiones, se ignora o se minimizan sus consecuencias. Sin embargo, desde Domus Dental te mostramos que es una afección que no debes dejar pasar.
En este artículo, vamos a conocer las causas del sangrado en las encías y qué debes hacer ante un problema como este. La prevención y el diagnóstico temprano son fundamentales para evitar complicaciones a largo plazo. Así pues, necesitamos comprender la gravedad y las soluciones que tienes a tu alcance.
Causas de las encías sangrantes
Una de las causas de las encías sangrantes más comunes es la gingivitis o inflamación de las encías provocada por la acumulación de placa bacteriana. Si no se elimina este problema a tiempo, la placa se endurece y se convierte en sarro, provocando una mayor inflamación y sangrado.
Otra de las causas más habituales es el uso inadecuado del cepillo y el hilo dental. Un cepillado demasiado fuerte o el uso de cepillo de cerdas duras pueden dañar o irritar las encías. Asimismo, la falta de higiene oral también contribuye a la acumulación de placa y al sangrado de tus encías.
Hay otros factores a considerar entre las causas de las encías sangrantes:
- Embarazo: los cambios hormonales incrementan la sensibilidad de las encías.
- Diabetes: una enfermedad que suele estar relacionada con problemas en las encías.
- Consumo de medicamentos que reducen la capacidad de la sangre para coagular.
- Tabaco: disminuye el flujo sanguíneo hacia las encías y las hace más susceptibles al sangrado.
¿Qué hacer si tus encías sangran?
Las encías sangrantes son un problema que requiere de una actuación inmediata por parte de nuestros dentistas en A Coruña. Una vez que notes el sangrado, puedes realizar enjuagues con agua tibia salada para reducir la inflamación y limpiar la zona afectada. No utilices enjuagues bucales fuertes o que contengan alcohol, ya que puedes irritar tus encías.
Si el sangrado es leve, puedes aplicar una compresa fría en el exterior de tu mejilla y cerca de la zona que sangra para reducir la inflamación. Además, a partir de ahora emplea un cepillo de cerdas suaves y realiza movimientos circulares al cepillar, especialmente en las zonas más sensibles.
No obstante, si el sangrado en las encías es persistente (más de un par de días), lo más recomendable será pedir cita en nuestra clínica dental en A Coruña. Comprobaremos si este problema está acompañado de otros síntomas (hinchazón, dolor, mal aliento, etc.). El sangrado prolongado puede ser ya signo de una gingivitis o una periodontitis.
Por último, mientras esperas tu cita no dejes de lado tu higiene dental. A su vez, evita los alimentos duros o picantes, hasta el punto de optar por una dieta blanda si fuera necesario.
Prevención de las encías sangrantes
Las encías sangrantes son un problema que se puede prevenir con una serie de medidas:
- Cepillarse los dientes dos veces al día de forma adecuada y con un cepillo de cerdas suaves.
- Usar a diario el hilo dental para eliminar la placa y los restos de comida que quedan entre los dientes.
- Enjuague bucal con productos que sean antiplaca y antigingivitis.
- Dieta equilibrada rica en vitaminas y minerales.
- Evitar el tabaco y limitar el consumo de alcohol.
- Visitar regularmente a tu dentista.
En Domus Dental contamos con una serie de tratamientos para solucionar tu problema. La primera visita que nos hagas es totalmente gratuita. Allí evaluaremos tu caso, detectaremos la causa del sangrado y te indicaremos el procedimiento a seguir. Todo ello sin esperas y con el mejor equipo de profesionales médicos a tu servicio.
